domingo, 3 de julio de 2011

Un juego de letras.

La semana pasada asístí a unas conferencias de ISKO sobre gestión del conocimiento, como en todo las había más o menos entretenidas. Como no es cuestión de estar faltando a unas conferencias que has pagado (Además que hasta que no empieza a veces no sabes cuan interesante va a ser, y a su vez es un feo que le haces a los conferenciantes); me llevé mi portátil, y a la par que atendía a las conferencias revisaba correos, notas, etc. En uno de los descanso me acordé de uno de esos vicios que tengo, aún siendo una persona poco sociable, me encantan los juegos de tablero (D&D, Warhammer quest (Hero quest), Cruzada estelar, Zombies, axis and allies, risk, trivial, …); decidí buscar alguna nueva expansión para el zombies.

Buscando en una web de un distribuidor, aparecia un juego que siempre me interesó Carcassonne (Que no voy a hablar de él ahora), que cumplía 10 años de su aparición. Como siempre estuve interesado en dicho juego, visité la web de la tienda de juegos que frecuento, y revisando todo un poco apareció de oferta el juego del que hoy voy a hablar “Bannagrams”.

En un descanso de las conferencias, me acerqué a la tienda, y a la vista del apetitoso precio, compre los dos ejemplares que quedaban (uno para mí, y otro para alguna contingencia).

En esencia puede parecer el screabble (otro gran juego de tablero), pero no, este juego además de su magnifico empaquetado (las 144 letras (Incluidas la Ñ, CH y LL) que lo componen vienen en una funda de tela con forma de plátano), aporta cierta frescura al anteriormente mencionado, así como unas normas que lo hacen más entretenido.

Las reglas son sencillas cada juagador cogerá 21 letras (De 2 a 4 personas, 15 de 5 a 6; y 11 de 7 a 8), las cuales comenzará a colocar en su propia mano (no en un crucigrama común) para ir creando un crucigrama, que se podrá modificar sobre la marcha si se considera necesario (DADO puedes querer variarlo al conseguir una M, una E y una R => DAMERO).

Cuando un jugador agota las letras que tenía cogerá una del saco, a la vez que dice SPLIT, y todos los jugadores deben coger una letra también.

Si no nos gusta una letra que podemos cambiarla, pero deberemos devolverla al saco y sacar 3 letras. Ganará el jugador que al vaciarse el saco, termine con su mano (Y obviamente no se haya inventado palabras o haya puesto nombres propios).

En mi caso además de juego, me aporta una herramienta para que la más pequeña de la casa practique la lectura y vea como se escriben las palabras de una manera entretenida; como ocio aporta partidas bastante rápidas, fluidas y divertidas.

P.D: Aunque suene como algo solitario, yo he probado a jugarlo solo a ver si era capaz de crear un crucigrama y cuanto tiempo tardaba en gastar todas las piezas, …. 45 minutos, así que hagan sus apuestas y a divertirse.

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